Hoy me he levantado hecho un trapo y es que veo la señal de meta en mi mente pero soy incapaz de dar crédito de ello, con lo cual... no puedo dormir.
La habitación muy bonita por dentro, pero un tanto dramática por fuera. Llegar de noche en el estado de New México, a un motel de carretera te hace sentir como en una película de asesinatos. Sobre todo si lo que te recibe antes de entrar en tu habitación es un extraño silencio que se interrumpe con el sonido de un viejo aire acondicionado y para darle más morbo a la escena, un coche con sus cuatro ruedas rajadas. Ahora que lo pienso lo mismo no tiene nada que ver "el cartelito de meta"
Estuve conduciendo durante gran parte de la mañana hasta que decidí parar a desayunar y mira por donde, me encontraba en el mismísimo centro de la Ruta 66. Allí hay un cartel que lo acredita y una cafetería, tienda de recuerdos que se beneficia de ello. También hay una "Pick Up" donde los viajeros dejan su nombre. Yo puse el de Bufalina, Bufalín, el mio y el de todos los seguidores del blog, de Facebook, el de mi pueblo, mi provincia y mi país... a los 10 min. trajeron otro vehículo porque yo había terminado todos los huecos que quedaban.
no veas que carita, parece que me han atravesao la flecha... y me ha gustao
(Esto es una Pick Up Mamá, un coche con la parte trasera descubierta, yo y los colegas la utilizaríamos para meter las tablas de surf, otros amigos, la moto jodida y otros a la suegra... vamos para meter cosas.. (Todos mis amigos aman y cuidan sus tablas, los otros respetan sus motos y los otros ventilarían a la suegra aquí))
Bueno, a lo que voy... seguí por la Ruta 66 y esta te saca y te mete en la autovía como ya os había comentado anteriormente, me cansé y me he pegado un buen tramo por esta última para adelantar tiempo. Sobre las 7 de la tarde, ya casi oscuro me metí de nuevo en la Ruta 66 ya por el estado de Oklahoma y después de cruzar completamente Texas. No había manera de encontrar un sitio a buen precio para poder dormir y el frío empezaba a ser insoportable. 100 km más tarde los dedos ya no funcionaban y vi una especie de bar pequeñito en la lejanía con 3 preciosas Harleys en la puerta. Frené con el único freno que me queda, el delantero. (Llevo así desde mediados de Rusia y nadie a podido arreglarlo, seguro que Juanmi de Motomar, da con la tecla) Aparqué la moto junto a las demás y bufalina allí no pegaba ni de broma.
Mientras me quitaba el casco con mis inútiles manos, observé que era observado a través de los cristales del local de madera. Podía oírse Rock & Roll y el estallido de unas bolas de billar. De pronto salieron 3 tipos enormes del local. Eran voluminosos, con vestimentas de cuero, botas puntiagudas y algunos lucían una blanca melena cuyo nacimiento era tapado con un pañuelo. Al salir, me pareció verlos caminar hacia mí en cámara lenta. Se acercó el primero. Un tipo de mi altura, pero tres veces mi cuerpo. Le tendí la mano y le dije mi nombre. -¡Tengo mucho frío! Mientras le sonreía. Luego se acercó otro y esta vez tuve que mirar hacia arriba. ¿Que pasa? Espetó entre su blanca perilla. A lo que le siguió un escupitajo a su derecha. Yo seguía mirando hacía arriba. -Frío, mucho frío. -¿De donde vienes? ...- De España... ¿Vienes desde New York?.. - hablaba bastante español.. - No, vengo desde Rusia... - Sus blancas cejas formaron una "V"
-¿Solo?...-Si- Mientra sonreía o mi mueca era fruto del frío. Entonces me dijo en español ...-¡Cojones tienes como toro! -Entonces pensé... si es por proporciones estoy seguro que me ganas. Me invitaron a lo que parecía un bar, que realmente era un auténtico club de moteros americanos. El club legendario club de los "Iron Dader" (Este club tiene sede en muchos países del mundo, como Londres, Sudáfrica o Canadá)
La velada fue muy interesante. Les explique como me había ido el viaje y les extrañó que viajara por allí y sin pistola. Me mostraron la suya y el machete más grande que he visto jamás. -En España, si la hoja es mayor que 4 dedos, no es legal, para esa necesitas la mano de King Kong... ver a esos tipos tan grandes y con esa pinta de matones partiéndose de risa y valorando mi aventura me llamó muchísimo la atención. En apenas una hora, en la que me han ofrecido bebida y comida, me lo he pasado en grande.
Les dije que tenía que marcharme, que estaba cansado y aún tenía que buscar un motel. El jefe, el grande de pelo blanco, mando a uno de los chicos a por algo que no entendí.
Se trataba de esta moneda que solo poseen los miembros de este club. Todo un orgullo para mí, poder tenerla en mis manos. Les pedí una foto de grupo para que mis compañeros de viaje, que sois vosotros pudieseis ponerle caras a algunos miembros del club "IRON DADER"
Les gasté una broma que fue más o menos así. - Os iba a pedir que sonriáis, pero no es pega nada... Se tronchaban...
hemos visitado la pagina de los Iron Order de Oklahoma y estaban las fotos del club de los colegas de pelo blanco que te recibieron, y otro con un machete que te cagas.
ResponderEliminarCuando vuelvas podrias hacer en el Box una exposicion con todos los recuerdos que has ido coleccionando por el camino.
No estas solo.
Ssludos de Lourdes y Pepe Cuesta
yeah¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ ese peazo de bufalo dejando huella hasta en los tipo mas rudos y forajidos de los EEUU. Dale caña a la moto, exprimete que ya te queda menos para realizar tu hazaña. Un fuerte abrazo, estamos contigo Fernando!!!!!!!
ResponderEliminar